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Mostrando entradas de noviembre, 2018

VILLAREJO Y RUFIÁN

Voy a tener que hacer, perdón por la comparación, lo que hacía Vargas Llosa cuando de joven viviera en París: de la cama a la escritura. Claro que para eso necesitaría a la tía Julia, viuda de un hermano de su madre: su primera esposa. Por lo visto, era ella la que le mandaba ponerse a escribir sin dejarle ojear/hojear siquiera los periódicos: para que su cabeza no se dispersara y continuase todo derecho lo del día anterior.     Resulta que yo tenía pensado volver a la carga con ‘mi hombre’, Gabriel Rufián, a propósito de su justa expulsión del césped parlamentario, luego de dos tarjetas amarillas, y decirle que me lo ha puesto muy difícil en lo que respecta al premio Nobel de la Paz que no ha mucho pedí para él. Asimismo, tenía pensado decirle que, no obstante lo cual, no pierdo la esperanza de que al menos le sea concedido el Príncesa de Asturias de la Concordia. ¿Que no? El tiempo, como siempre, acabará dándome la razón: Gabriel es el prototipo del “pequeño salvaje...

¿DEUDA HISTÓRICA?

             ¿DEUDA HISTÓRICA?    Agapito Gómez Villa   Imbuido, impelido, inducido por la “carta” de la directora del pasado domingo, “Deuda prehistórica”, y comoquiera que en ella no encuentro una explícita explicación/definición referente al apellido de la cosa, o sea, por qué lo de histórica, me echo al monte por mi cuenta en busca de tal: muy gorda ha de ser dicha deuda para merecer tan pomposo calificativo. Y hete aquí que me encuentro que, según la CADTM, Comité para la Abolición de la Deuda del Tercer Mundo, la Deuda Histórica es "la contraída fundamentalmente durante el colonialismo con los países y pueblos pertenecientes a las antiguas colonias, por la invasión y conquista de sus territorios, así como por la explotación de sus poblaciones y recursos" (sic). Dice más cosas, pero me parecen muy exageradas en lo que a Extremadura respecta, a pesar de la humillante y vergonzosa humillación ferroviaria consuetudinaria (...

DESPUÉS DEL GOL

   Bien sabía Rodríguez Ibarra lo que hacía, cuando mandó a sus huestes que votasen a Zapatero y no a Bono como secretario general. Seguro estoy de que le sucedió lo mismo que a mí: que quedó fascinado por la faceta de escritor, brillantísimo, de ZP. Verbigracia: el deslumbrante prólogo que José Luis dedicó a las “Ficciones” de su cuasi tocayo, Jorge Luis. Con una diferencia a favor de RI: que por entonces, dicho prólogo no había sido escrito aún. Lo cual añade a lo suyo un mérito suplementario: averiguar que estaba ante un gran escritor que aún no había escrito un renglón.   Alguien pensará que me estoy haciendo “un Borges”, es decir, que estoy hablando de un prólogo que no existe. De eso ni ‘parler’ (mando fotocopia del mismo al periódico). En efecto, yo también me quedé ‘pasmao’ cuando me topé con tan extraordinaria pieza: “… en algún momento llegué a pensar que cada página de Borges contiene toda su obra, como uno de esos objetos fractales que repiten su estructur...

LOS MOCOS EN LA BANDERA

              LOS MOCOS EN LA BANDERA Agapito Gómez Villa   No suelo ver la “Sexta”: por sectaria. Bueno, no suelo ver la tele, salvo el canal 76, “Viajar”, que me lleva gratis por los lugares más espectaculares del mundo; o los documentales, algunos de los cuales son impagables obras maestras: el otro día vi uno sobre el origen de la vida, pa morirse, por lo extraordinario, claro. (No se lo digan a nadie: también veo “Corazón, Corazón”, para enterarme de cómo van Ortega Cano y Paquirrín, ah, y el embarazo de Megan ‘Márquez’, que es como de casa.) Pero mira tú por dónde, la otra noche, me topo de bruces con el Gran Wyomin, personaje no exento de talento (ya saben, el corporativismo médico), impartiendo doctrina sectaria en su “Intermedio”. Por consideración a mis ‘invitados’, de la familia, no cambio de canal: así pude ser testigo de un acto incalificable: ¡es que no sé con qué adjetivos calificarlo! Sigamos.   A continuación del...