¿DEUDA HISTÓRICA?
Agapito Gómez Villa
Imbuido, impelido, inducido por la “carta” de la directora del pasado domingo, “Deuda prehistórica”, y comoquiera que en ella no encuentro una explícita explicación/definición referente al apellido de la cosa, o sea, por qué lo de histórica, me echo al monte por mi cuenta en busca de tal: muy gorda ha de ser dicha deuda para merecer tan pomposo calificativo. Y hete aquí que me encuentro que, según la CADTM, Comité para la Abolición de la Deuda del Tercer Mundo, la Deuda Histórica es "la contraída fundamentalmente durante el colonialismo con los países y pueblos pertenecientes a las antiguas colonias, por la invasión y conquista de sus territorios, así como por la explotación de sus poblaciones y recursos" (sic). Dice más cosas, pero me parecen muy exageradas en lo que a Extremadura respecta, a pesar de la humillante y vergonzosa humillación ferroviaria consuetudinaria (pa matarlos).
En verdad, en verdad les digo que jamás hubiese pensado que el asunto viniese de tan lejos; que Extremadura hubiese sido alguna vez una colonia: de cuando el imperio de los Austria, supongo. Pero pronto saldría de la duda: cuando páginas adelante me topo con el documentado reportaje (así se decía antes) de Antonio Armero, “35 años esperando a la deuda histórica”. Esto ya me parece más normal, me digo. Hay una cosa, empero, que sigue sin cuadrarme: llamarle histórica a una cosa que se remonta a siete quinquenios escasamente, pero que fue llamada así desde que era sietemesina, o sea, desde siempre. Y para eso no encuentro explicación que valga. Entonces, se me viene a las mientes una idea que sólo pensarla me produce urticaria, y que me aclara, ya de camino, por qué nunca me gustó lo de deuda histórica. ¿Lo de 'histórica' no será producto de la contaminación del papanatismo/infantilismo/esnobismo de cierto periodismo por el entorno de albañales sangrientos? En efecto, completamente seguro estoy (me juego la extra de Navidad) de que es una copia infecta de algo que me produjo náuseas desde el primer momento: desde cuando (así dice García Márquez), albores de la banda etarra, la insensatez informativa al uso se dejó comer la merienda y empezó a llamar 'miembros históricos' a los crimínales veteranos (consúltese hemeroteca). Por supuesto, cuando, escasos meses ha, Santi Potros, repulsivo ejemplar, salió en libertad (ni un año de cárcel por muerto), les faltó tiempo a los medios para llamarle dirigente histórico. ¿Son llamados acaso dirigentes históricos los grandes asesinos de masas del comunismo o del nazismo (primos hermanos) o los más recientes angelitos de la piedad de la guerra de los Balcanes. Anda ya. Señores periodistas que alguna vez llamasteis históricos a los psicópatas de la eta: va a tener razón Donal Trump cuando dice lo que dice de algunos medios.
¿Entienden ahora por qué nunca me gustó lo de la de deuda histórica? Total, que si yo fuese el Vara de turno, estaría dispuesto a renunciar a esos dineros mientras se le siga llamando como a los tíos de la eta. O mandaría a la Moncloa al cobrador del frac: "Que vengo a cobrar la deuda histórica de Extremadura". Por cierto, todas las Comunidades del ruinoso sistema autonómico, incluida la 'expoliada' Cataluña, han reclamado alguna vez su deuda histórica, salvo una: el País Vasco. Por qué será. Ustedes mismos.
Agapito Gómez Villa
Imbuido, impelido, inducido por la “carta” de la directora del pasado domingo, “Deuda prehistórica”, y comoquiera que en ella no encuentro una explícita explicación/definición referente al apellido de la cosa, o sea, por qué lo de histórica, me echo al monte por mi cuenta en busca de tal: muy gorda ha de ser dicha deuda para merecer tan pomposo calificativo. Y hete aquí que me encuentro que, según la CADTM, Comité para la Abolición de la Deuda del Tercer Mundo, la Deuda Histórica es "la contraída fundamentalmente durante el colonialismo con los países y pueblos pertenecientes a las antiguas colonias, por la invasión y conquista de sus territorios, así como por la explotación de sus poblaciones y recursos" (sic). Dice más cosas, pero me parecen muy exageradas en lo que a Extremadura respecta, a pesar de la humillante y vergonzosa humillación ferroviaria consuetudinaria (pa matarlos).
En verdad, en verdad les digo que jamás hubiese pensado que el asunto viniese de tan lejos; que Extremadura hubiese sido alguna vez una colonia: de cuando el imperio de los Austria, supongo. Pero pronto saldría de la duda: cuando páginas adelante me topo con el documentado reportaje (así se decía antes) de Antonio Armero, “35 años esperando a la deuda histórica”. Esto ya me parece más normal, me digo. Hay una cosa, empero, que sigue sin cuadrarme: llamarle histórica a una cosa que se remonta a siete quinquenios escasamente, pero que fue llamada así desde que era sietemesina, o sea, desde siempre. Y para eso no encuentro explicación que valga. Entonces, se me viene a las mientes una idea que sólo pensarla me produce urticaria, y que me aclara, ya de camino, por qué nunca me gustó lo de deuda histórica. ¿Lo de 'histórica' no será producto de la contaminación del papanatismo/infantilismo/esnobismo de cierto periodismo por el entorno de albañales sangrientos? En efecto, completamente seguro estoy (me juego la extra de Navidad) de que es una copia infecta de algo que me produjo náuseas desde el primer momento: desde cuando (así dice García Márquez), albores de la banda etarra, la insensatez informativa al uso se dejó comer la merienda y empezó a llamar 'miembros históricos' a los crimínales veteranos (consúltese hemeroteca). Por supuesto, cuando, escasos meses ha, Santi Potros, repulsivo ejemplar, salió en libertad (ni un año de cárcel por muerto), les faltó tiempo a los medios para llamarle dirigente histórico. ¿Son llamados acaso dirigentes históricos los grandes asesinos de masas del comunismo o del nazismo (primos hermanos) o los más recientes angelitos de la piedad de la guerra de los Balcanes. Anda ya. Señores periodistas que alguna vez llamasteis históricos a los psicópatas de la eta: va a tener razón Donal Trump cuando dice lo que dice de algunos medios.
¿Entienden ahora por qué nunca me gustó lo de la de deuda histórica? Total, que si yo fuese el Vara de turno, estaría dispuesto a renunciar a esos dineros mientras se le siga llamando como a los tíos de la eta. O mandaría a la Moncloa al cobrador del frac: "Que vengo a cobrar la deuda histórica de Extremadura". Por cierto, todas las Comunidades del ruinoso sistema autonómico, incluida la 'expoliada' Cataluña, han reclamado alguna vez su deuda histórica, salvo una: el País Vasco. Por qué será. Ustedes mismos.