Dijo Isaac Asimov que sólo reconocía dos inteligencias superiores a la suya: la de Carl Sagan y la de otro que no me acuerdo. Pues bien, ese hombre tan inteligente fue el que me metió el veneno de la cosmología en el cuerpo, asombroso "Cosmos": de la cosmología en general y de la astronomía en particular. Y al mismo tiempo, me "colocó" en el universo: soy uno de los siete mil millones de seres pensantes, evolución mediante, que, en este ratito de la historia del mundo viven en el único planeta habitable de los que orbitan alrededor del padre Sol, una estrella normalita entre las cientos de miles de millones que forman la Vía Láctea, que a su vez es una de las cientos de miles de millones de galaxias que integran el universo conocido. He dicho conocido. Una vez envenenado por Carl Sagan, entre Einstein y Stephen Hawking acabarían de rematarme. Lo cual que, en cuanto aparece una noticia relacionada con el particular, me voy tr...
Artículos de opinión publicados por Agapito Gómez Villa