Son tantas las aportaciones que he hecho desde estas páginas a la vida política y no política de España en general (como esos furgones donde reza “pintura en general”) y de Extremadura en particular, que ya he perdido la cuenta. Pues bien, dado el grado de degradación, me gusta la aliteración, que estamos viviendo, que raro es el día que no estalla algún escándalo en los aledaños de gobierno, cuando no en los interiores del mismo (los audios y whatshapp no tienen vuelta de hoja, con UCO o sin ella), ha llegado el momento de decirles que, una vez más, he dado con la solución a tanto desmán: el VAR político. Ni que decir tiene que la situación de degeneración, degradación, descomposición, putrefacción, pudrición, crispación, provocada por el ‘españolón politikon’ (zoon politikon, Aristóteles) no es nueva, que viene de la noche de los tiempos. En efecto: raro es el gobernante que, en estando más de una semana en el sillón, no se ha llevado por delante la ‘Contitusión’, que dic...
Artículos de opinión publicados por Agapito Gómez Villa