Ir al contenido principal

UNA JUGADA MAESTRA

Lo he glosado aquí en diversas ocasiones: durante los últimos decenios vi a diario el programa de La 1, “Corazón, Corazón”, no sólo por admirar a la impar Anne Igartiburu, “a la que todo le sale adornado”, que dijera Delibes de Umbral, sino por enterarme de cómo iba la vida nacional: Paquirrín y su madre, Ortega Cano y sus hijos y por ahí seguido. De la noche a la mañana, aquel programa tan instructivo, van y me lo cambian por uno de cocina (he dicho cocina, no Corinna, ojo), cuyo presentador era Miguel Ángel Muñoz, un muchacho que me cae de maravillas, desde que lo viera junto a Jesús Calleja por esos mundos de Dios. Y hete aquí que, cuando ya empezaba yo atreverme con la tortilla francesa, de sopetón, me quitan los fogones y me ponen una cosa destinada en exclusiva a seguir las andanzas del Emérito: que si cuentas en paraísos fiscales, que si tarjetas traslúcidas, perdón, opacas, que si defraudaciones millonarias, que si comisiones por aquí, que si donaciones por acullá. Ante lo cual, me digo para mis adentros aquello que se dijera de los vigilantes de la Santa Inquisición: “A buenas horas, mangas verdes”. ¿Que por qué digo tal? Muy sencillo: porque si los medios de comunicación no se hubieran dedicado, durante siglos, a reírle las gracias a don Juan Carlos, las cosas no habrían llegado a los límites legamosos adonde han llegado, que hasta hicieron un pacto, no para reírle las gracias, claro, sino para hacer la vista gorda ante las ‘conductas impropias’ del Jefe de Estado, ¡el pacto de los editores!, del cual fue ‘víctima’ hasta este simple colaborador: en casi cuarenta años, sólo se me ha dejado de publicar un artículo en este periódico (y los ha habido malos de remate): uno que hablaba de las “amistades peligrosas” del rey, Mario Conde por entonces. Oiga, que yo no digo que los señores de la tele no tengan razón, lo que quiero decirles es que ese nuevo programa (por lo visto, TVE está en manos del ‘Príncipe de los galápagos’) parece ideado para ir minando, corruptelas del Emérito mediante, el crédito de la institución monárquica, la piedra angular de nuestro ordenamiento constitucional. De seguir por ese camino, mucho me temo que no lleguemos a ver la entronización de una princesa que parece una princesa: doña Leonor. Pues bien, como me daría mucho disgusto que don Felipe dejase de ser el Jefe del Estado, ahora que, ¡al fin!, tenemos un Borbón presentable e intachable, implacable, ya lo verán, me voy a permitir el atrevimiento de hacerle una proposición muy honesta. Se me ocurrió viendo el discurso de Navidad: que don Felipe no espere a que se carguen la monarquía, que se adelante a los acontecimientos: que ponga su cargo a disposición popular y a continuación que se presente para presidente de la III República. Como dicen los argentinos, saldría campeón, seguro (lo siento, Peñafiel, tío valiente: tendríamos Letizia para rato).

Entradas populares de este blog

MUFACE Y LA MINISTRA IGNORANTE

Me lo dijo mi dilecto amigo, Manuel Encinas, más de cuatro décadas ya: “Abre la consulta”. Y como el consejo venía de una persona que tenía muchos dedos mentales de frente, abrí la consulta. Total, que toda la vida he trabajado para la seguridad social y para MUFACE, el funcionariado, mayormente de la docencia. Incluso me dio tiempo de ser médico de la institución penitenciaria, diez años. O sea, que conozco el paño como el primero. Por eso, cuando el otro día leí que la ministra de sanidad mostraba su decepción por la continuidad de MUFACE, me dije para mí: “Esta mujer no sabe lo que dice”. Nadie discute que el sistema nacional de salud, la seguridad social de toda la vida, es de lo mejorcito que hay por esos mundos de Dios: gracias al sistema MIR, claro, que no es otro el secreto. Pero no es menos cierto que, teniendo como tiene el funcionariado la posibilidad de elegir entre el sistema nacional y el de MUFACE, al iniciar su andadura profesional, y una vez al año para cambiars...

DE LOS ALERTEROS Y LOS POLÍTICOS

Se han pasado el verano acojonando al personal con alertas por la caló (les gusta más una alerta roja que a un tonto una tiza), y para una vez que han podido lucirse, la DANA valenciana, ha pasado como en el cuento del lobo. Me refiero a los saltimbanquis/as que han convertido una ciencia, la meteorología, en un espectáculo circense, que lo único que les falta es comenzar sus intervenciones como aquellos genios que hubo: “¿Cómo están ustedeeees?” Tendrían que aprender del profesor Jorge Olcina (COPE) y de José Miguel Viñas (Rne), o de Mario Picazo, físicos todos, unos señores que tratan la meteorología con un rigor y una seriedad que da gusto, no como esa pandilla de histriones/as, ya digo, que parece que fueran ellos los hacedores del clima. Así les ha lucido el pelo con la “DANA más catastrófica del siglo”, que es como titulan ‘los otros’ a todas horas, tal que si estuviéramos ya en el 2099. Dice José Antonio Maldonado, físico también, que no entiende por qué se tard...

EL SEXO CUÁNTICO

Eso es precisamente lo que están investigando y difundiendo las muchachas de Igualdad, el ministerio de doña Irene Trans, perdón, Montero, las jóvenes científicas que trabajan en el LISMI (Laboratorio de Investigaciones Sexológicas del Ministerio de Igualdad), al frente del cual se encuentra una señora que se hace llamar Pam. El sexo cuántico, o sea (no confundir con el sexo tántrico, el de Sánchez Dragó). Que qué rayos es el sexo cuántico. Muy sencillo: el sexo llevado a sus últimas minuciosidades, un suponer, el sexo durante los días ‘enrojecidos’, así como la exploración de otros ‘agujeros negros’ de la galaxia femenina, etc. Que por qué el nombre de cuántico. Porque es lo más parecido a la llamada mecánica cuántica. O sea, el sexo de lo minutísimo. Me explico. Así como existe una parte de la física que se ocupa del macrocosmos, al que dedicó sus poderosas neuronas “el más grande”, Albert Einstein (“la más grande” es Rocío Jurado), con su asombrosa teoría de la relatividad, e...