El famoso terrorista
internacional, Richard Gere, perdón, perdón, activista, es que así le llamaban
a los terroristas de la eta muchos periodistas, activistas, qué asco, qué
repugnancia, lo que hemos tenido que tragar, activistas, el mismo vocablo que
usan para calificar a los miembros más significados de una noble causa, Green
Peace, un suponer, y, claro, como terrorista y activista los han hecho sinónimos,
se me ha ido la pinza, les iba diciendo que el celebérrimo actor norteamericano
y activista, ahora sí, de los derechos humanos, cuyo nombre ya está escrito, ha
dicho nada más llegar a España: “Aplaudo a la alcaldesa de Madrid”. Los de
Podemos, como se pueden imaginar, nos pusimos más contentos que unas
castañuelas. Nada más y nada menos que un terrorista, perdón, activista, de la
fama mundial de don Ricardo, bendiciendo a nuestra alcaldesa piloto, Manuela
Carmena, o sea. Pero qué poco dura la alegría en casa del pobre. En ésas
estábamos, cuando, no repuestos aún de tantísima alegría, va y nos echa encima
un jarro de agua fría: “Estoy muy feliz (ya nadie está contento) de estar en
España. Tienen ustedes la suerte de vivir en un país maravilloso”. ¡Será c…! ¿España
un país maravilloso, con la cantidad de desgracias que nos rodean? Vamos
hombre. Seguro que éste acaba de leer “Ventanas de Manhattan”, de Muñoz Molina,
y tiene reciente el olor de los mendigos de Nueva York, los mendigos más mendigos
y malolientes del mundo, y como en España la gente huele bien…Y encima, va el
muy capullo y viene a decirlo en el crítico momento: en plena campaña
electoral. A ver con qué cara nos presentamos ahora en los mítines a decirle al
personal que España en un desastre lleno de carencias, de pobrezas, de
injusticias. Total, que uno de los nuestros nos ha jodido la campaña. Si lo
hubiera dicho Julio Iglesias, que ya lo dijo un verano reciente -“España es un
país moderno, con unas extraordinarias infraestructuras”- podríamos haber
contraatacado con lo de la derecha rica, rancia, casposa, clasista, pero a ver
qué le decimos a un terrorista, perdón, activista que, cual Francisco budista,
o cual Dalai Lama cristiano, tanto da, se va a visitar a los “sin techo” del
padre Ángel.
Entre lo de Ricardo y las comidas de Navidad,
lo tenemos claro. Que no, que ya no hay manera de encontrar un rincón donde
celebrar estos “entrañables días” con los compañeros. Yo creo que Rajoy ha
puesto las elecciones, perdón, los comicios, en estas fechas para dejarnos sin
argumentos. A ver cómo les hablamos de los cuatro millones de parados con los
restaurantes hasta la boca. Que encima dan trabajo a miles de personas, aunque
sea por unos días.
En fin, que entre lo de Ricardo, lo de Rajoy
y lo de Ortega estamos aviados. ¡Pues no va el Ortega y Gasset ése y dice que “la
vida del hombre medio hoy es más fácil, cómoda y segura que la del más poderoso
en otro tiempo”! Será para él, que es un señorito madrileño que sólo le gusta
estar rodeado de marquesas. Como el otro, que no conforme con haber tenido como
esposa a la impresionante Cindy Crawford, va y se echa de novia a una
espectacular y joven española: Alejandra Silva. Así, no me extraña nada que vea
a España como un país maravilloso. ¡Será capullo!