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Mostrando entradas de 2013

Dos soles y cuatro lunas

  Pasado mañana, a las doce en punto de la noche, despediremos un año, y un instante después, estrenaremos uno nuevo. Y la Tierra, que es la madre del cordero, sin enterarse de la misa la media. ¿Por qué digo esto? Hombre, está muy claro. ¿Qué es un año? Un año, lo saben muy bien los niños, es el tiempo que pasa entre los regalos de un cumple y los del cumple siguiente. Aniversarios infantiles aparte, un año, como es sabido, es una medida astronómica: el tiempo que la Tierra tarda en completar una vuelta alrededor del Sol, a la módica velocidad de 108.000 km por hora, con lo que dónde coños estaremos cuando acabe de escribir esta columna. (Si a eso le añadimos que el Sol se está moviendo a una velocidad infernal, en derredor del centro de la galaxia, la Vía Láctea, y que nuestra galaxia se aleja como un rayo de las galaxias vecinas, ya tenemos el lío montado. Ah, se me olvidaba decir que la Tierra también gira sobre sí misma. Con todo ese jaleo de movimientos, no me extraña nad...

Les tengo gato

      Ese funcionario me tiene gato, dicen los presos de ciertos vigilantes. Me tiene gato, o sea, la tiene cogida conmigo. Pues bien, vaya por delante que, de toda la vida, uno le tuvo gato a los financieros en general y a los banqueros en particular (no me refiero, claro es, a los currantes, sino a los cabecillas de la cosa, los que cortan el bacalao en el mercado, en los mercados, que dicen los sindicalistas). Parafraseando a Cela, cuando dice que los políticos son “personajes de tercera” (el tiempo le ha dado la razón, es lo que tienen los genios), a uno, los aclamados sabios de las finanzas siempre le parecieron eso, “profesionales de tercera”. Profesionales de un trabajo de tercera, sí, en comparación, claro es, con los de primera: ingenieros, arquitectos, biólogos, matemáticos, físicos, médicos (perdón por lo que me toca) y por ahí seguido. Por eso nunca vi con buenos ojos que individuos tan ‘elementales’ ocupasen las portadas de los periódicos y fueran elevado...

Gracias, Raúl

    Supongo que se habrán enterado de que se ha muerto Madiba, un señor que siempre se llamó Mandela: Nelson Mandela. Y supongo también que habrán visto por la tele las imágenes del impresionante homenaje que le fuera rendido en un estadio abarrotado de mandatarios y famosos del mundo todo, encabezados por el jefe supremo, o sea, Obama. De dicho acto, quedarán para el recuerdo tres momentos,   tres anécdotas, de los cuales todo el mundo se ha hecho lenguas y que, asimismo, han sido tratados hasta la saciedad por los cien mil opinadores ‘teleradioperiodísticos’ que hay en España, a saber: el saludo de Obama a Raúl Castro (unas décimas más largo de lo previsto), el intento de ligue del mentado Obama con la espectacular primera ministra danesa, con el consiguiente enfado de Michelle (es que no hay color, con perdón) y, por último, lo del falso traductor al lenguaje de los sordomudos, que eso sí que es de traca.    Pues bien, hay empero una secuencia del...

De Atapuerca a Mandela

  Dice Vargas Llosa, hablando de su faceta (brillantísima) como articulista/ensayista, que cuando joven en París, en Barcelona y por ahí, ‘lo bravo’ (sic) era llegar al fin de semana sin haber escrito una línea y enfrentarse a pecho descubierto con la página en blanco, horas antes de tener que entregarla al periódico. Eso mismo le sucede con frecuencia a este particular que les habla, en aras más que nada de la actualidad, o sea, todo lo acontecido en los últimos 400.000 años, que va a tener razón Eudal Carbonell cuando dice ingeniosamente que, para los antropólogos, cualquier descubrimiento con menos de esa edad es periodismo, pues que noticia periodística y gorda acaba de ser el estudio del ADN del fémur de un señor que vivió en aquel tiempo en la sierra burgalesa de Atapuerca. Es que lo peor no es elegir el asunto a glosar, qué va: lo verdaderamente dificultoso es el descarte. Ni que decir tiene que rara es la semana que no viene preñada de acontecimientos dignos de hincarle...

El verdadero nombre de Averroes

    Recuérdote de nuevo, amable lector, lo que dijo Cela, loor al gran genio: cuando en un sitio huele mucho a algo, la solución no es oler más fuerte, sino oler distinto. Digo esto porque hoy los medios apestan a la prematura excarcelación de los asesinos ‘comunes’, el de Anabel Segura, el de Olga Sangrador, el de las jóvenes de Alcácer, los repugnantes violadores de niñas, así como otras gentes de mal vivir, lo que no deja de ser una cortina de humo para ocultar la afrenta a las víctimas de la eta, por la puesta en libertad de los ‘activistas’, qué graciosos algunos periodistas, que de esa manera son amnistiados bajo el paraguas legislativo europeo, a instancias del gobierno de Zapatero, con la connivencia del PP, lo que yo te diga, que para eso mandaron a Estrasburgo a López Guerra, uno que fuera profesor de derecho de la UEX.     ¿Alguna duda? Bien. Como todo ha quedado claro, pasemos a oler a algo más agradable.    Tenía yo ganas de hinc...

Obsceno maridaje

  El otro día, algunos medios pusieron el grito en el cielo porque nadie del gobierno acudió a un acto del diario El Mundo, en el que se le hacía entrega a don Mario Vargas Llosa de un premio por su faceta de columnista, labor que ejerce con brillantez extraordinaria. Estoy convencido de que, prudentemente, decidieron no asistir cuando se enteraron de que yo tenía pensado escribir esta columna/invectiva, como te lo cuento.   “Por nuestro santo Padre el Papa Pablo, por nuestro obispo Manuel (en Cáceres), por nuestro jefe de Estado Francisco, el pueblo y el ejército” ¿Les suena de algo, verdad? De aquello me acordé, no ha muchas semanas, al ver besándose en la boca (poco les faltó) a los políticos y a los periodistas en el aniversario de otro periódico: La Razón (bueno, lo había pensado antes: en la entrega de los premios de este periódico, acto en el que los políticos tienen un protagonismo fuera de lugar). Vergüenza ajena sentí, por no decir repugnancia, al ver semejant...

Arte y oficio

    La otra tarde, Luis Landero nos dio una conferencia. Fue con motivo de la inauguración del nuevo curso de la Escuela de Letras de Extremadura, Cáceres: “Lo que yo sé sobre el oficio de escribir”. Ni que decir tiene que la conferencia fue de una gran amenidad, pues que, además de grande escritor, Luis es un conferenciante muy brillante, que para ello no le falta ni la gracia ni la cultura ni el talento (ni el oficio). De entrada, lo primero que se me ocurre decir es que escribir no es ‘sólo’ un oficio, es además, y sobre todo, un arte, un arte con mayúsculas, el arte literario: la literatura. Lo que pasa es que Luis es un hombre muy sencillo y no ha querido llamarse a sí mismo artista. Mal asunto cuando la escritura es ‘sólo’ oficio, cuando le falta el arte. Sale entonces una prosa correcta, pero sin ángel. García Márquez versus Vargas Llosa. Un artista supremo, el primero; un profesional abnegado, el segundo.   No era cuestión, claro está, de levantarse y ...

La doctrina Parot

     Recuerdo como si fuera ahora mismo la primera tarde en la doctrina, iglesia de mi pueblo, que así llamábamos a aquellas reuniones, media docena de niños en derredor de la catequista, doña Conce, que estoy viendo moverse sobre su pecho la sirena plateada y colgante que lucía. “Madre, que esta tarde tengo doctrina”. O sea, doctrina de la Santa Madre Iglesia. La única que había. Menos mal que muy pronto empezarían a llamarle catequesis. De haber continuado llamándole doctrina, ¿qué pensaría hoy un niño al escuchar en la tele lo de la “doctrina Parot”, y que su padre le dijera que el tal Parot había sido condenado por 82 asesinatos? Es que, de unas semanas a esta parte, no hay día que no salga a relucir la célebre doctrina del sanguinario terrorista, más bien su versión inversa, o sea, la derogación de la misma por el Tribunal de Estrasburgo, una petición del gobierno español a la alta instancia judicial, lo que yo les diga, para darle una pátina de legalidad a la...

Un niño en la silla pontificia

  De todo lo dicho sobre el papa Francisco, lo mejor ha sido lo de El Roto y un columnista de este periódico: Tomás Martín Tamayo. El Roto, “único intelectual comprometido que había en España en 1997”, según mi admirado Muñoz Molina, lo clavó en una de sus genialidades cotidianas: “Nos ha salido un papa cristiano. Qué calamidad”, afirma con gesto apesadumbrado un cardenal orondo, desde su poltrona cardenalicia. El otro, o sea, TMT, escribió, no ha muchas semanas, una columna tan lúcida, tan brillante, tan rotunda, que mereció la felicitación del portavoz de la Conferencia Episcopal. Como lo oyen. “Francisco” se titulaba.   Dicho lo que precede, ustedes me van a permitir que yo aporte mi granito de arena sobre tan estelar personaje, que no hay semana que no nos dé un titular, como dijo uno, hablando de Dani Alves, futbolista cuyos razonamientos dejan chico a don José Ortega (advierto del riesgo de la vuelta a Atapuerca, de persistir en los medios el ‘crescendo’ oratorio ...

Manolo Escobar

  Tres Manolos tiene Espa ñ a, que nadie puede tener, Manolo Escobar es, se ñ ores, Santana y el Cordob é s", cantaban "Los dos Espa ñ oles", all á por las profundidades del siglo pasado, en aquellos entra ñ ables 'arradios' del parte y de los discos dedicados, cuando muchos   millones de espa ñ oles viv í amos en crisis sin saberlo. Ya s ó lo nos quedan dos. Uno de ellos, el m á s aventajado de la terna, el que ha conseguido pasar de un siglo a otro sin despeinarse, se nos acaba de ir; vamos, que se acaba de morir. Cuando yo era un chavalillo, que apenas sab í a fumar, ya te quer í a serrana con un cari ñ o formal.           La banda sonora de nuestra vida le han llamado los de la tele a la m ú sica de Manolo Escobar. No s é si la de ustedes, pero al menos la m í a s í . Cruzaba por los cercaos de noche y con afici ó n, yo quer í a ser torero y darte mi coraz ó n. Mayormente en esa etapa que va de la infancia a la adolescencia. C...

El parche en el ojo

  “La del pirata cojo, con pata de palo, con parche en el ojo, con cara de malo”, canta mi admirado Joaquinito, que el otro día se llevó un buen susto, en una de sus más célebres creaciones músico-literarias (no cejaré hasta conseguir que le concedan el Príncipe de Asturias, sólo o con Serrat incluido). ¿Vetaría hoy Barcelona una foto del pirata cojo? Casi con toda seguridad. ¿Por la pata de palo? No, por el parche en el ojo. Eso es lo que acaba de hacer la Ciudad Condal con la espectacular foto de Juan José Padilla, destinada a publicitar por todas las farolas una exposición de la World Press Photo, imagen que fuera premiada, para más inri, el año pasado por dicha entidad periodística. En la misma, aparece el torero con gesto severo, calzándose la montera y luciendo parche negro en el ojo que no tiene: lo perdió en violentísimo percance taurino. Como protesta por la medida, no servirá para nada, un nutrido grupo de “intelectuales y artistas” se han retratado de la misma guisa....

Verdi y Extremadura

   Hoy quería yo hablarles de Verdi, que por un pelín no nació el mismo día que mi nieto mayor, doscientos años atrás, claro. Pero como canta el tango, doscientos años no son nada. ¿A ver quién es el guapo que me dice a mí que la música de Verdi no parece recién compuesta? Bueno, el caso es que el otro día, el 10, se cumplieron los dos siglos del nacimiento de uno de los genios más portentosos que ha generado la especie, la nuestra. Verdi, sí, será uno de los dos grandes genios que me acompañarán (uno no se codea con cualquiera) en la hora del regreso al ‘maternicio’ polvo estelar del que procedemos, yo al menos: el otro es Beethoven, tercer movimiento de su novena. Ya dije hace un siglo que cuando me llegue la hora, una de las secuencias que pasará a toda mecha por mi cabeza será el coro de esclavos de Nabucco, aquella vez que tuve la inmensa fortuna de ‘vivirlo’ en la envolvente penumbra del teatro de la ópera de Varsovia.   Y hablando de genios, ahí va otro par:...

Desde Shanghay con amor

    Cuando vi aparecer al señor Monago, flanqueado de chinos (no sabía yo que el señor Bono era de por aquí) abriendo un telediario en la televisión china, no sólo se me cayó el escaso montoncito de comida que con tanto denuedo había conseguido reunir en la punta de los palillos, eso sí, con ayuda de los dedos (a ver, no había ni un cachito de pan con que ayudarme), sino que se me cayeron los palillos también. Lo de la boca abierta por la sorpresa se da por supuesto.    Resulta que me hijo, por imperativo profesional, viaja de vez en cuando a lugares remotos, bueno, remotos eran antes, que ahora parece que el mundo se nos ha quedado pequeño. Esta vez le tocaba Shanghay. Ustedes ya saben que a mí me gusta viajar más que a un tonto un charco, y como me quedasen unos días de asueto, me dije, al modo sabiniano, cuando se encontró a su mujer, “se llamaba digamos que Maruja”, con un señor en la cama: “¡ésta es la mía!” (es que el pobre nunca había estado en una o...

El cambio de la hora

   Anda el personal un tanto alborotado con el presunto cambio de la hora, que por lo visto estamos en un huso horario que no es el que corresponde a un país que es enjaretado a la altura de Zaragoza por el celebérrimo meridiano de Greenwich, o sea, el meridiano cero, que algún punto de referencia habría que tomar, ya que el mundo, o sea, la Tierra, no se está quieta ni un instante, según la bellísima canción de Jimmy Fontana, muerto recién, ay: “Oh, mundo, que no ha parado ni un momento”. En efecto, desde que hace unos cuatro mil quinientos millones de años, trienio arriba, trienio abajo, nuestro planeta comenzase su andadura alrededor del sol, no ha parado de girar como una loca, ¡a mil setecientos km por hora!, siempre en el mismo sentido, de izquierda a derecha, lo que propicia, claro es, que el sol salga cada mañana por el Mediterráneo, dejándonos a los extremeños en el furgón de cola peninsular. ¿Hay derecho a eso?   Sinceramente, creo que es una clarísima in...

Correo confidencial

    La noche del pasado jueves, recibí un correo confidencial que en un primer momento me llenó de indignación y de estupefacción, una mezcla homogénea de ambas cosas: “Asunto delicado. Me dicen que el rey se va en dos días a Houston a ser operado. La fuente es alguien de la Casa del Rey que se lo ha trasmitido a ... Es un poco fuerte para ser un bulo, pero yo de … me fío lo justo. De ser cierto, el anuncio se haría el fin de semana para tratar de evitar impactos en los mercados por inestabilidad…” Como sea verdad, mañana mismo me hago catalán, me dije nada más terminar de leerlo; pero no de Convergencia ni de Ciu, qué va: me hago de Esquerra Republicana. Y con esa cantinela me fui a la cama y con la misma me desperté. “No creo que se les ocurra llevárselo fuera, como a un Chávez cualquiera. Sería una afrenta intolerable a los miles de buenos profesionales de la medicina que hay en España. ¿Te imaginas al presidente de la República Francesa viajando al extranjero para ser ...

Vaticanólogos olímpicos

      Hace cuatro días como el que dice, Japón sufrió la mayor catástrofe natural de su historia (lo de Hiroshima y Nagasaki fueron catástrofes artificiales): un devastador tsunami que dejó al país al borde del colapso (“tsunami: ola asesina”, decía mi libro de geografía del bachillerato). La hecatombe fue de tales dimensiones, las pérdidas fueron tan cuantiosas, que hizo tambalearse a una de las economías más prósperas del planeta. Pues bien, a dicho país querían ustedes quitarles la olimpiada para dársela a Madrid. Ustedes lo que no tienen es caridad con el prójimo. ¿Se imaginan lo que hubiera supuesto para la población japonesa el revés de quedarse sin la olimpiada, después del espantoso estremezón del tsunami? Madrid se ha quedado una vez más sin la olimpiada, sí; pero, gracias a Dios, España se ha quedado sin tsunami. ¿Hubieran preferido lo contrario? Vamos anda.   Mucha ilusión se había hecho el personal en esta ocasión. A cuento de qué. Muy sencillo. A ...